"Quien domina la lengua, domina la estructura." Michael Foucault
El problema de la lengua y su influencia sobre las masas lo tenemos que remontar hasta los tiempos en los que el hombre erar un recolector cazador, este se vio en la necesidad de crear asocios que fueran importantes para lograr objetivos en común, para este punto previo a la consolidación de las primeras sociedades primitivas, el hombre era un nómada que no limitaba su existencia a una sola región geográfica, sino que este se movía a conveniencia para lograr los mejores recursos.
Con la domesticación del ganado y el trigo, el hombre inicio el proceso de lo que hoy llamamos civilización, es acá cuando los egipcios primer gran potencia mundial, desarrollan un sistema de comunicación por jeroglíficos, sentando las bases para lo que los sumerios harían desarrollando el primer sistema de comunicación escrita formal. Hasta este punto por medio de tradición oral se habían desarrollado sistemas o clases, que servirían como justificantes para decir porque unos dominarían sobre otros.
Con el desarrollo de la lengua surge la necesidad en el hombre primitivo y moderno de dominar estructuras, creando clases, el problema no es problema como diría un cantante guatemalteco hasta que aquel primer sistema de cooperación se convierte en uno de dominación. Cuando el hombre descubre el potencial de la oratoria y lo mezcla con elementos fantásticos arraigándolos en el imaginario colectivo surgen los dominantes y los dominados.
Estos últimos por necesidad más que todo, se apegan a un sistema que podría decirse que no es el natural, donde unos cuantos no solo dominan la lengua, sino los recursos. Siendo los recursos un bien preciado por la mayorías, es por esto que surgen los primeros conflictos. Es por los bienes que hay guerras en la actualidad y las han habido a lo largo de la historia. En la modernidad con la ayuda de recursos retóricos y estéticos es cuando vemos que la lengua ya no solo cumple una función meramente comunicacional.
Sino que esta se hace cómplice de un sistema creado por aquellos que dominaron, de esa forma la lengua será el principal catalizador para sustentar muchos de los conflictos que ha tenido la humanidad, sean estos por designios divinos, de razas, de clases y ahora en nuestros días de género. ¿Pero por qué la lengua tiene este problema? Por lo mismo que hay guerras, por saber quien será el dominante y quienes serán los dominados.
Entonces podríamos decir que lengua es conflicto, la verdad no, depende esto mucho del uso que se le de. La retoricas de odio, de desprecio o de legitimación al sistema, dependerán del uso que estos le den a la lengua. ¿Quiénes son estos? Todos nosotros, de nosotros dependerá si hacemos una ruptura a la tradición o si creamos una nueva, una que no tenga que dañar la sacralidad de la lengua, creyendo que son las palabras las que alimentan sistemas, porque la palabra como tal no tiene valor, el valor se lo atribuyen los que con sus argumentos hacen planteamientos y quienes los escuchan los repiten.
Porque el lenguaje como lo diría Chomsky solo es una facultad humana, pero lo que se hace con ella es lo que alimenta al sistema y quienes lo repiten lo legitiman. Cuidemos de no repetir ideas contrarias a nuestros ideales y no seamos simple reproductores, sino seamos actores activos cuestionado
todo, venga de donde venga.
Comentarios
Publicar un comentario